Agave en crisis
NÉSTOR YURI SÁNCHEZ
Medios nacionales documentan desde hace un año el declive del precio del agave tequilero. En Oaxaca este tema casi no se menciona. Sin embargo, la caída del agave tequilero significa también la caída del agave mezcalero y, debido al peso que en los últimos años ha adquirido la cadena productiva del mezcal en la economía estatal, el impacto de la crisis en puerta debe ser atendido desde ahora.
A través de una entrevista con el doctorando del IPN Ángel Saúl Cruz Ramírez tuve la oportunidad de conocer la investigación desde el punto de vista econométrico que hace de la producción del mezcal en Oaxaca y que, por más que se quiera ignorar, se rige por la ley de la oferta y la demanda: a mayor abundancia de materia prima, menor precio del producto. La investigación la resumiremos en la sección de Ciencia que publicamos en EL IMPARCIAL los miércoles dentro de unas pocas semanas.
La información proveniente del Consejo Regulador del Tequila, CRT, señala que existe una gran oferta de agave, al grado de que ni todas las tequileras juntas tendrían la capacidad de procesarlo, por tanto, el precio está bajando desde los $25 por kilo a los actuales $10. Ellos mismos están alertando a los sembradores del agave que analicen muy bien la reconversión de sus cultivos debido al largo ciclo de siete años que necesita el agave tequilero para madurar. Es decir, piensen bien qué van a sembrar porque los precios estarán bajos por varios años.
El agave mezcalero está siguiendo los pasos de Jalisco. De estar por arriba de los $15 por kilo hace 5 años, hoy apenas alcanza los $8 y se han sembrado miles de hectáreas adicionales. El mercado del tequila está padeciendo un estancamiento de consumo en los Estados Unidos y es seguro que el mezcal seguirá sus pasos y, de acuerdo con los patrones culturales en que descansa su demanda influido por la tendencias culinarias hispanas, no será fácil introducir altos volúmenes de mezcal en otras regiones del mundo con menos presencia mexicana.
A diferencia de otras crisis anteriores, la velocidad de la caída de los precios es lo que sorprende. La investigación econométrica de Ángel Saúl Cruz Ramírez descubrió, con datos duros, que el mezcal y el tequila tienen un ciclo de entre 17 y 18 años a partir de 1966, por lo que ahora estamos saliendo de la parte superior de los precios altos y nos dirigimos al ciclo de los precios bajos que, explicado por el mismo investigador, suelen durar, por lo menos, el doble de años que los ciclos de altos precios. Tenemos un problema en puerta que tendrá repercusiones sociales en el campo oaxaqueño. En palabras bíblicas, tanto el gobierno como los productores y todos los que participan en la cadena productiva deberán prepararse para los tiempos de las vacas flacas.
Alrededor del mezcal se han construido mitos y se han levantado fortunas, se han deforestado bosques para disponer de leña, se ha contaminado el suelo y se han usado enormes cantidades agua por cada litro producido. Pero también se han creado fondos de inversión respaldados por la producción de agave. ¿Veremos otras vez, como cuando las cooperativas de ahorro, a miles de personas protestando porque perdieron el dinero invertido ante la caída de precios?
Busqué información en la página web del Comercam y no hay alertas o información para los productores, pero si otras cifras que indican que el mezcal genera 55 mil empleos directos, provoca una derrama superior a los $36 mil millones de pesos o que hay más de 125 mil familias están involucradas en esta cadena productiva. Lo que si publican es que entre el 2022 y el 2024 la producción de mezcal tuvo una reducción del 13.6% en promedio. Esto significa que los mezcaleros deberán competir más por sacar su producción al mercado y deberán empezar a bajar precios para lograrlo. Es la ley de la oferta y la demanda que rige al mercado y que también le pega al tequila, aunque la diferencia entre uno y otros es abismal: se producen más de 600 millones de tequila al año por solo 14 millones de litros de mezcal en el mismo periodo. Por cierto, el super peso del que tanto se ufana el presidente es una de las causas de la caída de las exportaciones porque encarece al mezcal de exportación.
De acuerdo con el doctorando Ángel Saúl es necesario implementar políticas que aminoren el golpe porque es posible que los precios se recuperan hasta el año 2034 o más de acuerdo con el ciclo económico por él descubierto. Al agave, entonces, habrá que encontrarle otros usos, como la producción de miel o alimento. Los campesinos deberán analizar la reconversión de sus cultivos y mucha gente metida al negocio del mezcal deberá encontrar la forma de sobrevivir si la bajada de precios es muy acentuada. Hay en este momento una sobre oferta de agave.
Esta crisis en puerta no significa el fin ni del tequila ni del mezcal, pero habrá mucho menos dinero disponible en esa cadena productiva.
nestoryuri@yahoo.com