base de cráneo en Oaxaca

Oaxaca, Oaxaca — En un importante avance para la medicina en el estado, se realizó una de las primeras cirugías endoscópicas de base de cráneo para corregir un aracnoidocele, una condición que estaba poniendo en riesgo de manera irreversible la visión de una paciente. Este innovador procedimiento permite acceder a zonas profundas del cerebro de forma mínimamente invasiva, con menos riesgos y un periodo de recuperación más rápido, lo cual representa un hito en la cirugía neurológica en Oaxaca.

Se llevó a cabo el pasado mes de junio de 2024 en el Hospital del Valle por el Dr. Josué Alejandro Cervantes González, Neurocirujano.

La paciente, de 66 años, había comenzado a notar una pérdida progresiva de la visión en ambos ojos debido a la compresión ejercida por el aracnoidocele, una acumulación de líquido que presiona sobre estructuras cercanas al nervio óptico. Con la endoscopia, el equipo médico pudo acceder a la lesión sin abrir el cráneo y reparar el daño con precisión, protegiendo estructuras vitales y evitando así la progresión del deterioro visual.

El procedimiento se programó debido a que una mujer estaba perdiendo la vista de forma irreversible debido a un síndrome conocido como “silla turca vacía” en el cual los nervios ópticos encargados de enviar las imágenes al cerebro sufren daño crónico.

Esta cirugía se considera de mínima invasión, pues no deja ninguna cicatriz visible a la paciente.

«Este tipo de cirugía se considera una de las más seguras para abordar problemas en la base del cráneo, ya que el endoscopio permite una visión ampliada y detallada de la zona afectada sin necesidad de incisiones grandes», explicó el Dr. Josué A. Cervantes, neurocirujano a cargo del procedimiento. «Sabemos que muchas personas tienen miedo de someterse a una cirugía en una zona tan sensible, pero este tipo de procedimiento minimiza los riesgos y aumenta las posibilidades de una recuperación exitosa.»

La endoscopia de base de cráneo es una técnica de vanguardia que cada vez se implementa en más hospitales del país debido a sus múltiples beneficios. Además de mejorar la seguridad, también reduce significativamente el tiempo de recuperación en comparación con las cirugías abiertas. Para esta paciente, la operación significó no solo la esperanza de recuperar su visión, sino también la tranquilidad de saber que el procedimiento es seguro y bien tolerado.

«Invitamos a la comunidad a que no tengan miedo de informarse sobre estos procedimientos. La medicina ha avanzado mucho y este tipo de operaciones pueden salvar la calidad de vida de los pacientes sin someterlos a riesgos innecesarios», concluyó el Dr. Cervantes.

Con intervenciones como esta, Oaxaca se posiciona a la vanguardia de la neurocirugía en el país, ampliando el acceso a tratamientos de última generación para mejorar la vida de sus ciudadanos.